No somos conscientes de qué nos aporta nuestra pareja y por eso nos cuesta valorarlo, reconocerlo y verbalizarlo. Y tampoco somos consciente de todo aquello que nos falta y eso, sin saberlo, nos produce frustración y malestar; ojo! eso no significa que nuestra pareja nos lo tenga que dar todo porque no existen parejas perfectas ... bueno con la excepción de mi mujer que roza la perfección ;-)
Qué bonito sería hacer consciente lo inconsciente, identificar todo lo que tenemos y todo lo que nos falta, y entonces tener una conversación tranquila, madura y constructiva con nuestra pareja para buscar ese punto de encuentro y realizar ese ajuste tan necesario en las relaciones.